Ancora una vita finita anzitempo. Ancora una morte di quelle che lasciano senza parole. Anche perché questa volta si tratta di un ragazzino. Pare avesse sui sedici anni. Un adolescente. Che anziché andare a scuola e uscire con gli amici stava tentando di bruciare la frontiera. E' morto annegato la notte tra venerdì e sabato scorso, tentando di raggiungere a nuoto, via mare, la città di Ceuta, una delle due enclave spagnole sul territorio marocchino. Di lui non si conosce il nome né l'origine. Un altra vittima senza nome di questa sporca frontiera. E adesso chi spiegherà a sua madre come si muore a 16 anni alle porte d'Europa?
Di seguito i dettagli della notizia sulla stampa spagnola.
CEUTA - Agentes de la Guardia Civil recuperaron a primera hora de la mañana de ayer el cadáver de un inmigrante subsahariano que había pretendido entrar a nado bordeando el espigón de Benzú, ayudado por un chaleco salvavidas. Aparentemente, según las apreciaciones de la Benemérita y las estimaciones iniciales del médico forense, podría tratarse de un adolescente, de unos 16 años, extremo éste que se confirmará en la autopsia que se le realizará en las próximas horas.
Agentes de la Benemérita localizaron el cuerpo flotando en el agua, procediendo a su recuperación y traslado hasta la orilla. El joven había intentado entrar en Ceuta esa misma madrugada, falleciendo en el intento por cruzar un corto recorrido que es el que separa el lado marroquí del español, bordeado y separado únicamente por el espigón de Benzú.
Tras la llegada de la autoridad judicial se procedió al levantamiento del cadáver, pasadas las nueve de la mañana, siendo trasladado hasta el cementerio de Santa Catalina para la práctica de la autopsia que apuntará las causas exactas de su muerte.
El joven había intentado su entrada en solitario, ya que de los exámenes de las cámaras del COS no se ha detectado otras entradas por ese mismo punto en ese periodo horario. Ahora el Instituto Armado intenta la identificación del joven para conocer si tenía familiares en el CETI o compatriotas que le conocieran. El mes pasado la Benemérita recuperó también el cuerpo de otro inmigrante, esta vez magrebí, cuyos restos se encontraron en la playa del Tarajal. No pudo superar la alambrada
Hace años la Delegación del Gobierno ordenaba blindar los espigones de Benzú y Tarajal colocando alambradas y concertinas, al objeto de hacer más complicada la entrada de los inmigrantes por mar. El joven fallecido ayer no pudo superar siquiera este espigón falleciendo en su intento por alcanzar el otro lado, en este caso la costa ceutí. Un recorrido corto pero complicado.
Di seguito i dettagli della notizia sulla stampa spagnola.
Encontrado el cadáver de un subsahariano
Lunes, 28 de Febrero de 2011, Carmen EcharriCEUTA - Agentes de la Guardia Civil recuperaron a primera hora de la mañana de ayer el cadáver de un inmigrante subsahariano que había pretendido entrar a nado bordeando el espigón de Benzú, ayudado por un chaleco salvavidas. Aparentemente, según las apreciaciones de la Benemérita y las estimaciones iniciales del médico forense, podría tratarse de un adolescente, de unos 16 años, extremo éste que se confirmará en la autopsia que se le realizará en las próximas horas.
Agentes de la Benemérita localizaron el cuerpo flotando en el agua, procediendo a su recuperación y traslado hasta la orilla. El joven había intentado entrar en Ceuta esa misma madrugada, falleciendo en el intento por cruzar un corto recorrido que es el que separa el lado marroquí del español, bordeado y separado únicamente por el espigón de Benzú.
Tras la llegada de la autoridad judicial se procedió al levantamiento del cadáver, pasadas las nueve de la mañana, siendo trasladado hasta el cementerio de Santa Catalina para la práctica de la autopsia que apuntará las causas exactas de su muerte.
El joven había intentado su entrada en solitario, ya que de los exámenes de las cámaras del COS no se ha detectado otras entradas por ese mismo punto en ese periodo horario. Ahora el Instituto Armado intenta la identificación del joven para conocer si tenía familiares en el CETI o compatriotas que le conocieran. El mes pasado la Benemérita recuperó también el cuerpo de otro inmigrante, esta vez magrebí, cuyos restos se encontraron en la playa del Tarajal. No pudo superar la alambrada
Hace años la Delegación del Gobierno ordenaba blindar los espigones de Benzú y Tarajal colocando alambradas y concertinas, al objeto de hacer más complicada la entrada de los inmigrantes por mar. El joven fallecido ayer no pudo superar siquiera este espigón falleciendo en su intento por alcanzar el otro lado, en este caso la costa ceutí. Un recorrido corto pero complicado.